Iglesia datada entre el siglo XI y XII de estilo romanico que aúna las tradiciones lombardista y jaquesa, con ábside semicircular decorado al exterior con arquillos ciegos de tradición lombarda y dos lesenas mediales. Parte del ábside fue reedificado a mediados del siglo XX al ser derribado por un rayo en una tormenta estival. Los albañiles no reprodujeron los arcos lombardos en este tramo ni la ventana central que se intuye al exterior y todavía se conserva en el interior.
La nave es rectangular, techada a dos aguas y ampliada en fechas posteriores añadiéndole un atrio que oculta la interesante portada y la torre.
Precioso tímpano compuesto por tres círculos tangentes. El central y mayor contiene un arcaico crismón trinitario con las letras en posición heterodoxa. El de la izquierda un cuadrúpedo que parece ser un cervatillo o un ternero y el de la derecha un grifo. Ambos con la cabeza vuelta hacia la grupa.
En las enjutas inferiores hay dos grupos compuestos de tres bezantes y en las superiores dos cabezas barbadas.
Sillar tallado en altorrelieve que representa una figura humana de marcados rasgos arcaizantes alanceando un animal que podría ser una serpiente o un dragón.
Tosca estela discoidea, desubicada, que presenta por una de sus caras una cruz patada en bajorrelieve. La tradición oral la hace proceder desde la desaparecida ermita advocada a Santa Ana, al sur del pueblo.
La iglesia de los Santos Ángeles Custodios presenta dos influencias constructivas muy claras. Mientras que la cabecera se construye siguiendo esquemas lombardos, la nave se construye en el siglo XII siguiendo la tradición emanada de la seo jaquesa y del cercano monasterio de San Juan de la Peña. En el siglo XVII se derribó el muro de la Epístola para construir una nueva nave de cabecera plana, comunicada por un gran arco con la nave central y una torre campanario que situaron a los pies de la nave.
Los habitantes de Binacua, aseguran que la figura tallada es San Jorge. (Patrón de Aragón)
La estela discoidea, por su parte, se trata de una pieza extraída del entorno de la desaparecida ermita de Santa Ana, situada al sur del pueblo.
La nave es rectangular, techada a dos aguas y ampliada en fechas posteriores añadiéndole un atrio que oculta la interesante portada y la torre.
Precioso tímpano compuesto por tres círculos tangentes. El central y mayor contiene un arcaico crismón trinitario con las letras en posición heterodoxa. El de la izquierda un cuadrúpedo que parece ser un cervatillo o un ternero y el de la derecha un grifo. Ambos con la cabeza vuelta hacia la grupa.
En las enjutas inferiores hay dos grupos compuestos de tres bezantes y en las superiores dos cabezas barbadas.
Sillar tallado en altorrelieve que representa una figura humana de marcados rasgos arcaizantes alanceando un animal que podría ser una serpiente o un dragón.
Tosca estela discoidea, desubicada, que presenta por una de sus caras una cruz patada en bajorrelieve. La tradición oral la hace proceder desde la desaparecida ermita advocada a Santa Ana, al sur del pueblo.
La iglesia de los Santos Ángeles Custodios presenta dos influencias constructivas muy claras. Mientras que la cabecera se construye siguiendo esquemas lombardos, la nave se construye en el siglo XII siguiendo la tradición emanada de la seo jaquesa y del cercano monasterio de San Juan de la Peña. En el siglo XVII se derribó el muro de la Epístola para construir una nueva nave de cabecera plana, comunicada por un gran arco con la nave central y una torre campanario que situaron a los pies de la nave.
Los habitantes de Binacua, aseguran que la figura tallada es San Jorge. (Patrón de Aragón)
La estela discoidea, por su parte, se trata de una pieza extraída del entorno de la desaparecida ermita de Santa Ana, situada al sur del pueblo.
